2012/05/31

El autoritarismo empresario sobre los usuarios


Al interior de una empresa no existe la democracia, ya que los trabajadores no pueden decidir más que sobre las políticas de producción ya establecidas de manera casi vertical. Esta es una regla del capitalismo que llevaría mucho tiempo y esfuerzo revertir. Pero lo que intentaremos mostrar aquí no es sobre ese autoritarismo, sino sobre el que ejercen las empresas de servicios no ya con sus empleados, sino con los usuarios de sus productos. El autoritarismo empresarial sobre los usuarios comenzó principalmente a partir del momento en que la mayoría de estas empresas dejaron de ser parte de la esfera pública para pasar a la privada. En este sentido la defensa del consumidor es una política correcta que debiera profundizarse, y que además debiera ir en el sentido del control que los mismos usuarios deberían realizar sobre los servicios que ofrecen las empresas a las cuales contratan para obtenerlos. Sin dudas, esto es parte de un incremento potencial del rol del Estado, y dejar paulatinamente las reglas de juego propias del ejercicio antitético de la libre empresa, esa que según esa lógica puede hacer lo que quiera, para incrementar sus ganancias, y despotricar contra la falta de seguridad jurídica, cuando son ellas mismas las que casi siempre actúan en la casi impunidad.
La existencia de monopolios en servicios como la telefonía tanto fija como móvil, banda ancha, televisión por cable, transportes, etc., etc. incrementan el autoritarismo empresario, y debiera por lo tanto establecerse una política de Estado para proteger a los usuarios.
El reciente fallo de la Corte Suprema de Justicia acerca del controvertido artículo 161 de la Ley de Servicios Audiovisuales, que propone la desinversión monopólica fue frenado por tres años por una cautelar, y esto muestra a las claras que si bien hay un poder corporativo en retroceso, aún falta un camino largo por recorrer.

2012/05/30

Naturaleza e Historia en Marx y Freud


Sigmund Freud en el apartado denominado Una concepción del mundo (Die Weltanschauung) que se encuentra en las Nuevas lecciones de introducción al psicoanálisis de 1931, reconocía de la teoría de Karl Marx, el planteo sobre la determinación económica de la sociedad, haciendo la salvedad de que para él, no se trataba de la única determinación, ya que hay a su vez otros aspectos que inciden sobre los sujetos sociales de forma igualmente efectiva, la cultura por ejemplo. Obviamente que este cuestionamiento es sólo aplicable a un marxismo vulgar y mecanicista. Freud en el mismo texto reconocía su insuficiencia en la lectura del materialismo histórico.
En relación al proceso económico social Freud expresaba no compartir o tal vez no entender aquello de que la historia sea un proceso dialéctico o histórico- natural (naturgeschichtlich), aludiendo que eso de la dialéctica era un resabio de la oscura filosofía hegeliana por la cual el mismo Marx había pasado. 
El problema de Freud en este sentido era confundir a la dialéctica idealista con el método dialéctico del materialismo histórico. “La historia no es un proceso de evolución dialéctica de conceptos”, en esto Freud tenía razón, pero se equivocaba al considerar que Marx concebía lo mismo que Hegel en cuanto a la dialéctica. 
En el Prólogo a la 2da. Edición de El Capital, Marx lo decía con todas las letras, su dialéctica era Hegel patas para arriba, la contradicción es la interrelación de los nexos que al interior del objeto producen su movimiento. A su vez, en La Ideología Alemana, manifestaba que la historia no ocurre en un plano ideal, siendo su fin la autoconciencia, el espíritu del espíritu, sino, que ocurre en el plano puramente material. La dialéctica marxista es la contradicción en el seno de la materia, la unidad de los contrarios., mientras que la dialéctica en Hegel es la negación de la negación, a saber la síntesis entre dos pares antitéticos, donde lo primeramente negado se conserva de forma subvertida.
En relación a lo histórico- natural, Freud expreaba que en el proceso histórico no hay nada que se parezca a una ley natural. Esto es verdad, pero habría que entender que lo enunciado por Marx en cuanto a concebir al desarrollo de las formaciones económico sociales como un proceso histórico natural, se debiera entender como una forma que alude a dos aspectos diferenciados y a la vez simultáneos. En primer lugar a la búsqueda de una ley económica principal, propia a una formación social dada, que posea la rigurosidad de las leyes de las ciencias naturales. Por otro lugar la historia es el proceso por el que el hombre a partir del trabajo transforma a la naturaleza en cultura, los objetos naturales en productos. Afirmaba Marx en La Ideología Alemana: “La naturaleza en el sentido del hombre primitivo, no existe hoy en ningún sitio, excepto en alguna isla coralina de formación reciente”. En definitiva, las leyes de la historia no responden a leyes biológicas (al menos en primera instancia). De hecho la irrupción de la biología como parte del discurso de la ciencia es el resultado de la necesidad histórica de transformar la naturaleza. El sujeto humano como resultado de necesidades en última instancia biológicas no encuentra más que en la estructura social y en la actividad productiva, la resolución a aquellas necesidades que ya no obedecen estrictamente a una ley natural. Esta significación marxista de lo natural como algo más bien perdido (transformado) por la producción de bienes materiales (obviamente determinados en última instancia por la naturaleza) se aproxima sin más a la concepción con la que Freud elaboró su teoría de las pulsiones (das triebes), en tanto distintas del instinto animal.

2012/05/25

25 de Mayo- La Revolución inconclusa


El 25 de Mayo, no fue una fecha al azar. Ese día pero hace 203 años se producía en Charcas, hoy Sucre, la rebelión de Chuquisaca, que fue nada más ni nada menos que el primer grito libertario de la América Indiolatina. Allí uno de sus líderes y redactor de la proclama de la insurrección fue el tucumano Bernardo de Monteagudo, un revolucionario jacobino perteneciente a la Logia Lautaro de la cual también formara parte José de San Martín.
Un año después se proclamaría en el Río de la Plata, la Revolución de Mayo, donde también descollara otro abogado formado en Chuquisaca, Mariano Moreno quien se había formado en las ideas revolucionarias de Jean- Jacques Rousseau.
Ante la crisis que vivía el reino de España, los revolucionarios del Sur no se dejaron seducir por la idea de que el gobierno le sea entregado a la infanta Carlota Joaquina de Borbón, y tanto en 1809 como en 1810, esta fue la plataforma del independientismo.
Como en toda revolución, debe haber tanto una estrategia a seguir, como una dirección efectiva que la lleva adelante sin vacilaciones. Como afirmaba Dantón, una vez iniciada la insurrección se trata de “Audacia, audacia” y no volver atrás, ya que hacerlo significa la derrota. Esto, Moreno lo tenía muy claro, y en esa presunción escribió el Plan revolucionario de Operaciones, que era sin dudas el esquema práctico y político de cómo llevar adelante la revolución sin darles tregua a los restauradores del viejo orden colonial.
1810 fue el despertar de un proceso genuino de emancipación, transformación, y construcción de una Patria libre, que la historia demostró que no tuvo la continuidad necesaria para ser plasmado.
En el Plan de Operaciones Moreno escribía: El emprendimiento de la obra de nuestra libertad, a la verdad, es tan grande, que por su aspecto tiene una similitud con los palacios de Siam, que con tan magníficas entradas, no presentan en su interior sino edificios bajos y débiles; pero la Providencia que desde lo alto examina la justicia de nuestra causa, la protegerá, sin duda, permitiendo que de los desastres saquemos lecciones las más importantes. Porque aunque algunos años antes de la instalación del nuevo gobierno se pensó, se habló, y se hicieron algunas combinaciones para realizar la obra de nuestra independencia; ¿diremos que fueron medios capaces y suficientes para realizar la obra de la independencia del Sud, pensarlo, hablarlo y prevenirlo? Qué sacrificios hemos hecho, en qué emprendimientos, que sean suficientes para que podamos tributarnos loores perpetuos por la preferencia de la primacía? ¿Qué planos y combinaciones han formado más laboriosas áreas, para evitar que se desplome un edificio que sin pensar en la solidez que debe estribar sus cimientos, queremos levantar con tanta precipitación?
Permítaseme decir aquí, que a veces la casualidad es la madre de los acontecimientos, pues si no se dirige bien una revolución, si el espíritu de intriga y ambición sofoca el espíritu público, entonces vuelve otra vez el estado a caer en la más horrible anarquía. Patria mía, ¡cuántas mutaciones tienes que sufrir!
A 202 años de la gesta revolucionaria de Mayo, la Patria sigue pidiendo Libertad, y tal vez recién en este tiempo, se pudo interpretar ese grito en toda su intensidad.

2012/05/24

Uribe no te creo nada


“Sos un audaz Uribe” Néstor Kirchner

El desbaratado intento de bomba contra el ex presidente colombiano Álvaro Uribe Vélez el pasado martes en el Gran Rex de Buenos Aires deja muchas dudas, al menos para quien escribe. Cuando el cronista se entera del fallido atentado, lo primero que intenta es encontrar fuentes que le permitan saber de qué forma se produjeron los indicios que luego terminarían con el encuentro de la caja donde se encontraba un teléfono celular que explotaría cuando el ex presidente neogranadino iría a disertar. Pero ese dato, consistía solamente en que un empleado de limpieza había encontrado la caja de 10 x 15 limpiando el techo, y esto por supuesto resultaba demasiado poco creíble, y mucho más cuando lo que estaba en juego era la ponencia de un ex mandatario que en su país había hecho de los falsos positivos una política de estado.
Una semana antes de lo del Gran Rex se produjo en Colombia un atentado “terrorista” contra el ex ministro uribista Santiago Londoño, y es recomendable leer al respecto una nota que escribió Emiliano Guido para Miradas al Sur el pasado domingo, es decir, dos días antes del fallido atentado en Buenos Aires, de la cual se puede extraer este fragmento: “En ese sentido, hay que preguntarse quién se beneficia, objetivamente, con la situación. Entonces, cabe afirmar que el bombazo que estremeció esta semana a Colombia no debe haber sido activado con la mano izquierda. Más bien, todo lo contrario” Cuando Guido habla de mano izquierda es porque el uribismo pretendía culpar a las FARC del atentado, en una coyuntura donde el actual presidente Juan Manuel Santos cada vez más enfrentado a Uribe intenta iniciar un diálogo de paz con la guerrilla.
Antes de la asunción de Santos al gobierno de Colombia, durante el año 2010, la agencia ANNCOL, tildada por el establishment colombiano de ser parte de la guerrilla, en una nota de opinión este medio diferenciaba al saliente Uribe del próximo mandatario. Mientras Santos es parte de una oligarquía colombiana tradicional, es decir de una casta si se quiere un poco más cultivada, y proclive a la negociación, Uribe pertenece a lo que en el país caribeño se denominan los “paisas”, una nueva oligarquía que se benefició del desplazamiento de campesinos, que logró enriquecerse con eso, y que luego fueran la dirección efectiva del narcoparamilirarismo. Hoy las diferencias entre Santos y Uribe se profundizan, mientras el primero ni bien asumió convocó al ex presidente Néstor Kirchner para mediar en el conflicto con la Venezuela de Hugo Chávez, el segundo quiere ser una referencia obligada de la nueva derecha latinoamericana. Es de destacar que quien sucedió a Kirchner en la titularidad de la UNASUR fue la colombiana María Emma Mejía, proveniente del Polo Democrático Alternativo (PDA) que si bien no es de la misma fuerza que el actual presidente, cuenta con el aval de éste.


2012/05/23

Gobierno y Poder- Una distinción clave



En la entrevista que le realizara Alejandro Fantino, al vicegobernador Gabriel Mariotto, durante el programa televisivo Animales Sueltos se pudo escuchar como pocas veces, un esbozo muy claro de línea política. Si bien hoy es un lugar común enunciar consignas como: “Profundizar el modelo”, “Revalorizar la política”, o “Ir por más”, muy pocas veces existen planteos que apuntan a la construcción de una guía para la acción militante, más allá de saludar las políticas que lleva a cabo el gobierno nacional. Pareciera de esta forma que el rol de la militancia estuviera solamente supeditado a movilizarse por los logros de la gestión, pero sin tener un horizonte claro de cómo seguirla. Tener una línea política, es aún un déficit para las organizaciones de base, y es por esto que las declaraciones de Mariotto llevan consigo una impronta sumamente válida. No voy a transcribir literalmente lo enunciado por el vicegobernador, sino intentar desmenuzar algunos conceptos válidos para la acción política.

Gobierno y poder

Si bien esta es una distinción que cualquier cuadro político conoce, y mucho más los que vienen de viejas militancias, es bueno escuchar la diferencia aplicada a los tiempos que corren. La izquierda peronista de los ’70 enunciaba: “Con los votos al gobierno, con las armas al poder”. Llegar al poder era el imperativo por el cual, había que destruir todo el orden oligárquico e imperialista, para sentar las bases de un nuevo poder, el de los trabajadores y el pueblo para romper definitivamente con la dependencia. La experiencia del ’55 ameritaba la estrategia de asalto al cielo, y el golpe del ’76 demostraría largamente que los poderosos no se rendirían sin resistencia, sino más bien que estaban dispuestos a aniquilar a las fuerzas populares.
La experiencia democrática en el ’83 nació débil, y los gobiernos que se sucedieron sucumbieron al lobby de los poderosos. Radicales y peronistas (vaciados de la doctrina nacional) sucumbieron con la crisis de 2001, donde el pueblo les pidió “Qué se vayan todos”. El kirchnerismo es el emergente social y político de la sociedad argentina que en el 2001 estalló en mil pedazos.
Para Mariotto, Néstor Kirchner vinó a recuperar las banderas del movimiento nacional y popular tal como se concibieron en el lapso comprendido entre el ’45 y el ’55. Se alcanza el gobierno y se lo utiliza como un instrumento para combatir al poder, y si la reacción oligárquica hoy no es como en la segunda mitad del siglo pasado, es porque se está efectuando un afianzamiento de la democracia. El kirchnerismo al igual que el primer peronismo es un frente donde confluyen diferentes opciones políticas, el peronismo es frentista y factor de unidad en la diversidad. El vicegobernador es tajante: no se puede ser peronista sin ser kirchnerista, pero se puede serlo proviniendo de otras matrices ideológicas, como en el peronismo inicial donde confluían laboristas, socialistas, anarquistas, nacionalistas y radicales. Pero lo importante es el proyecto: enfrentar al poder de las corporaciones, ese poder al cual otros gobiernos se sujetaron. El kirchnerismo se concibe como un tipo de gobierno que no deja por fuera las convicciones más profundas de la emancipación nacional y social. El gobierno es de tal forma el instrumento para construir paulatinamente y de forma gradual, la justicia social para las amplias masas populares.
Sin dudas en el medio del enfrentamiento, se encuentra la revalorización del Estado, como palanca clave para el desarrollo autónomo, y esto conlleva un pasaje desde un modelo agroexportador o simplemente de factura de materia prima o commodities, para comenzar a sustituir importaciones e industrializar toda la cadena de producción, tal como la presidenta propuso con el esquema de industrializar la ruralidad.
Hoy la construcción de la fuerza política apta para llevar adelante el proceso, necesariamente debe hacerse desde la confianza, es decir, ir sumando y formando a los cuadros y militantes que no se dejen seducir por los cantos de sirena del poder, y estén dispuestos a luchar hasta las últimas consecuencias, por una patria justa, libre y soberana.

2012/05/12

“Discutamos todo y vayamos para adelante”


El que escribe pretendía hacerlo sobre el surgimiento de la “Juan Domingo” y sobre el tema que ayer los medios se encargaron de meterlo en un amplificador, o sea el cruce entre el vicegobernador Gabriel Mariotto y  funcionarios afines al gobernador Daniel Scioli. Un tema que sin dudas merece la reflexión, pero sin olvidar que los nuevos tiempos exigen debate y no teorías conspirativas. Cómo afirmaba un viejo militante: “Discutamos todo y vayamos para adelante”
Las contradicciones dentro de un proyecto político, debieran ser la palanca para avivar todos los debates pendientes, y no la excusa que posteriormente se podría utilizar para justificar rupturas. La revitalización de la política necesariamente, debe conllevar la ampliación de las representatividad, y para esto es imprescindible que surjan nuevas voces y por ende discusiones que hasta el momento podrían ser considerados tabúes, o intocables. Solamente un estilo de trabajo donde muy pocos deciden el rumbo, aplicándolo como verdad revelada, justifica que no haya debate, y que eso se preste a cualquier suspicacia o sospecha donde se podría pensar que los que así lo hacen priorizan su privilegio personal o corporativo, en lugar de los intereses generales.
El kirchnerismo fue inaugurando paulatinamente una nueva forma de concebir la política, generando debates, que por años se habían perdido o postergado, y justamente por eso fue sumando a una masa crítica muy importante de militancia, entre la que se destaca la gran presencia de jóvenes, como también de muchos viejos activistas, e intelectuales. Esta novedad evidenciada principalmente a partir del conflicto con las patronales agropecuarias, implica un verdadero renacimiento, tras haber sufrido nuestro pueblo las más crítica crisis de representatividad allá por el 2001, cuando se pedía “Que se vayan todos”. Profundizar el rumbo de la democracia, y del modelo de inclusión social y ciudadana, implica superar viejos vicios de la política o del estilo de trabajo, que llevaron a esa crisis.
El intento fuerte que realizan los medios hegemónicos, es retrotraer la actitud de las mayorías hacia la política tal cual era hace poco más de una década, y es por esto que hablan de militantes pagos o en busca de cargos, como si el compromiso y la ideología no existieran, intentando sin dudas tapar el sol con las manos. Lo peor que le podría pasar a este incipiente movimiento, es caer en la lógica que esos medios canallas intentan subsumirlo. 

2012/05/01

Los trabajadores “combatiendo al capital”


La sociedad industrial impone una condición ineluctable, a saber: el que produce, debe estar despojado de los medios con los cuales lo hace. El obrero no puede ser nunca dueño de la maquinaria, sino solamente saber utilizarlas, saber hacer. Esta es la condición para que el propietario de esos medios, pueda vivir sin trabajar, utilizando para sí, la fuerza laboral que compra en las condiciones que casi siempre impone, a través de la ley o de la fuerza. La puja entre capital y trabajo es la constante de la sociedad que emergió en Europa a fines del S. XVIII y que luego se extendió por todo el planeta. La arbitrariedad patronal tiene su fundamento, y es su propia rentabilidad.
Hoy recordamos la gesta heroica de aquellos trabajadores que hace 126 años, peleaban en Chicago por la reducción de la jornada laboral a 8 horas. Sin lucha, la balanza se desajusta, tiende a que las condiciones laborales lleguen a un límite parecido a la esclavitud. Pero la historia demostró que el maniqueísmo patronal es una distopía inviable, ya que la dignidad resiste.


En los hechos, todas las riquezas construidas de la sociedad, son obra de los trabajadores, y ahí radica su fuerza, aunque “combatiendo al capital” sin la existencia de un Tercero, de una “instancia Otra”, la dualidad inevitablemente se transforma en una encerrona trágica. La revuelta obrera tuvo en sus inicios a la asociación como su principal herramienta: el nacimiento de las uniones y los sindicatos, pero esto era incipiente. Luego los partidos, incluidas las internacionales, y en la realidad latinoamericana un elemento completamente original: el Estado.
Toda la etapa neoliberal estuvo signada en nuestro país por la precarización, la flexibilización, el desempleo, la pérdida de conquistas y la mayor burocratización de las organizaciones gremiales, provocando una escisión creciente entre las direcciones y sus bases, muchas de las cuales ni siquiera llegaban al derecho a estar representadas sindicalmente. El desempleo constituyó el núcleo duro de la desarticulación de la fuerza obrera, y el chantaje explícito para disciplinar a los que conservaban un empleo.
Este 1ro de Mayo de 2012, nos encuentra en una situación diferente, con un incremento de la fuerza laboral, con la creación de miles nuevos puestos de trabajo, con la negociación colectiva, con la posibilidad de generar una Argentina industrializada, y si bien esto es el resultado de la resistencia popular, la existencia de un Estado que es capaz de arbitrar la puja distributiva, resulta esencial.

1º de Mayo- Los mártires de Chicago


Hace apenas 126 años. Eran los albores de la revolución industrial en los Estados Unidos, ese momento de la historia cuando el trabajo manual simple era sustituido por la mecanización y la producción en serie, ese tiempo donde los trabajadores, le comenzaban a ofrecer mucho mayores ganancias, a los propietarios de las nuevas fábricas.

El obrero de entonces, el de siempre, el único bien que tenía, que tiene, es su fuerza de trabajo, presta para cambiarla por un salario que el patrón le pueda ofrecer. Por aquel tiempo, los trabajadores vislumbraron que la jornada laboral debiera ser de 8 horas, quedando 8 para el sueño y 8 para el ocio. Para el patrón que el obrero trabajara 24, aunque muera entre las máquinas, le daba mayor rentabilidad, y es por esta razón que la demanda le resultaba intolerable.
El 1 de mayo de 1886 doscientos mil trabajadores iniciaron la huelga general por las 8 horas. La ciudad de Chicago fue el epicentro de la movilización extendiéndose por algunos días más. Allí la fábrica McCormick, de maquinaria agrícola seguía en actividad gracias a la colaboración de los rompehuelgas, y el día 3 una concentración en la puerta de dicha fábrica, provocaría que la policía reprimiera violentamente, produciendo seis muertos y varias decenas de heridos.
Ante este desgraciado hecho, los trabajadores convocaron a un acto el día siguiente en el parque Haymarket Square, logrando el permiso del alcalde quien a su vez iría a estar presente en la jornada prevista. Tras dos horas de acto el jefe de la policía consideró que ya era tiempo suficiente y procedió al desalojo de los casi veinte mil concurrentes. Comenzó la represión, y cuando un explosivo estalló entre los uniformados, perdiendo la vida uno de ellos, esto resultó la mejor excusa para abrir fuego sobre los manifestantes produciendo una cantidad importante de muertos y heridos, para luego decretar el estado de sitio. Los días siguientes, fueron de cacería: allanamientos, detenciones, y pruebas plantadas.
La prensa se sumó a la caza de brujas, y exhortaba a que todos los detenidos extranjeros fueran ajusticiados en la horca. El 21 de junio se inició un fraudulento juicio contra 31 detenidos, que luego se reducirían a ocho, de los cuales tres irían a prisión y cinco sentenciados a muerte. Todos ellos fueron acusados de ser enemigos de la sociedad y del orden establecido.
Desde la óptica de aquella justicia hoy se conmemoraría el “Día de los enemigos de la sociedad y del orden establecido”, pero si esto no es así, es porque la lucha obrera no se detuvo, alcanzando conquistas, mejorando su condición, pero hay que saber que sin la existencia de contrapesos, la esencia de la explotación aún sigue siendo la misma.