El lenguaje es un flujo de sonidos que en sus intermitencias, en la disparidad de intensidades, en sus alteraciones; se estructura.
Tenemos una
visión metafísica sobre el lenguaje, que lo cree disociado de lo biológico.
Obviamente que no se puede entender sobre el lenguaje si se lo intenta explicar
desde lo biológico o desde lo bioquímico, pero lo que tampoco se puede es
obviar su procedencia material.
El gran descubrimiento de Freud fue percatarse de que el lenguaje inerva al sistema nervioso en su totalidad.
Tanto el lenguaje como la música están creados a través de contornos nerviosos.
Este
planteamiento no invalida la diferencia entre naturaleza y cultura, si no que
intenta articularlas de otra forma.
El trabajo, la
sexualidad, la alimentación, son adquisiciones culturales. Sus modos adquieren
autonomía con respecto a lo biológico, aunque siempre vendrán a saciar
necesidades naturales.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario